Cuando desees ABANDÓNALO.

25 julio, 2010

Increíble puede ser...

Estaba cansada ya, me ignoraba todo el maldito tiempo, ¿qué diablos quería de mi? no aguanto la presión acumulada en mi corazón ahora nada es igual, como hago para intentar cautivarte.
Sin embargo trate de interrogarte y todo eso fue en vano, mi corazón de niña se fue enmudeciendo cada vez mas cuando me dijiste que todo acabaria, y que carajos se iba a acabar sin jamas iniciamos algo, era estúpido lo que me decías, estuve dos malditos años tras tus caprichos y acciones de niño y aun así no conseguí ni la mitad que creo que me merezco, ¿todo este odio que tengo guardado quien mierda me lo saca?.
Hasta que ese día fue un poco bastante mas distinto de lo normal, me invitaste a tu casa y lo sentí extraño, muy extraño realmente.
Llegue y ni bien te salude me dijiste que estaba hermosa, me reí y te dije que vos siempre lo estás, obviamente respondiste con tus comentarios egocéntricos (maldita acción que me mata de vos), entonces me invitaste a tomar algo, se sabe que estaba mas que encantada con todo eso, y realmente me parecía cada minuto mas extraño.
Hablamos de la vida, no paraba de ver y desear tu boca, hasta que me atreví y a acercarme cada vez mas, y me tomaste del cuello y me empujaste hacia tus labios, en ese momento sentí que todos esos días de suplicar tanto tu amor no habían sido en vano y aun así pude comprobar que besarte era lo mas mágico que podía hacer mientras esté viva. Luego de eso empecé a tocarte, la temperatura se me había ido hasta el cielo y estaba irradiada de ganas de hacerte de todo, entonces vos también comenzaste a tocarme toda, y ahí recién pude sentir todo ese deseo cumplido, ya no era fantasía.
Me tomaste la mano y me dijiste que subamos a tu habitación y fue ahí donde recién caí en tu trampa de hombre macabro, pero ya era tarde, estaba prendida en tus garras y era imposible salirme. Entramos y me tiraste de una manera violenta pero exitante a tu cama y me dijiste que de esta vez no me iba a arrepentir nunca jamás en mi vida, ya estábamos completamente desnudos como todos venimos al mundo, y en ese entonces apareció una chica la cual conocía solo de vista un par de veces de tu oficina, pero no supuse que iba a formar parte de nuestra actuación sexual.
Nos tenias cautivadas a las dos, pues ella también formaba parte de ese club pequeño de chicas que están enamoradas de vos y vos nunca las pescas.
Comenzamos a tocarnos de una manera mas lujuriosa y mas alocada entre nosotras, vos solamente mirabas mientras tomabas una copa de vino, recuerdo que ella era hermosa, su cabello rubio se mezclaba entre mis senos y sus ojos miel me miraban con cara de que siga haciendo lo que le hacia, pasarle levemente la lengua por todos esos lugares exitantes, oler su piel suavemente, y acariciarle esas partes de a poco, me encantaba como se abría de piernas cada vez mas, era perfecta, cuando comencé a introducirle mis dedos levemente, pude ver sus gestos de placer y poco a poco sus gritos tan especiales. Entonces tuviste que interrumpir nuestro acto de sexo entre mismos sexos y nos tomaste a las dos y comenzamos a besarnos cada vez mas intensamente, no se que fue, pero esa mujer me hizo olvidarme de todo lo que había sufrido por vos, toda esa ignorancia que solo vos me pudiste dar, se había ido, ahora toda esa pasión se volcaba en ella y ella se volcaba en mi, ya no eras imprescindible.
Entonces me canse de tus acciones de hombre descarado, y la tome del brazo y le dije que se cambiara rápido, me quería ir con ella bien lejos de ese hombre que jamas me amo como yo a el y que nunca sintió nada por mi.
Ella me miraba con ojos de quererme cada minuto mas y todo eso era tan extraño, nunca la había visto mas de cinco veces en toda mi vida, pero todas esas acciones de piel a piel y algo mas me hicieron reconocer que lo único que quería en esta vida era una mujer, preciosa como ella, inimitable y radiante.
El miraba todo con caras de no estar satisfecho con su acto machista y nos rogó que nos quedemos, cuando en eso ella no tubo mejor idea que escupirlo y decirle que era un pobre de sentimientos que jamas nadie lo iba a querer como algún día lo quisimos nosotras, que se perdió de todo lo que le podíamos dar, y que ya era tarde, habíamos encontrado nuestras medias naranjas, él nos pidió perdón pero ya era tarde, teníamos todo listo para irnos a cualquier lado con tal de jamas cruzarlo de vista.
Nos fuimos, lejos, no recuerdo muy bien donde porque cada vez que narro esta historia me pierdo en el recuerdo de sus ojos miel mirándome pidiendome cada vez mas placer y me pierdo en sus susurros de mujer ardiente diciendome que no la deje nunca, que el poder de la igualdad había invadido su mundo y ahora jamas querría salir de el.

1 comentario:

  1. la que lo pario que historia :O como volo mi imaginacion no te cuento, y menos me conviene decir entre quienes la imagine jaja quiero vivir unos años mas (? reeee hermosa mal mal mal...otra otra otra ♪ como escribe mi actriz porno diosss u.u ♥

    Te Quiere Mucho Mucho Tu Futura Rubia jaja ♥

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